...aquella reyna decidió salir de su tablero para mostrar a arcademonio la cataluña que sentía desde pequeña en su interior...comenzaremos por Sant Pol de Mar: el paseo en moto, la brisa, el sol, el vermut en una terracita con vistas, las callejuelas y el momento autofoto, la sonrisa dibujada en ambos rostros, leerte un cuento en catalán en la playa, el fresquito de la vuelta...la siguiente excursión la hicimos en su coche...tras perdernos decidimos que yo conduciría su carruaje y ella ejercería de pincha...me gusta tu música y el modo tan divertido en el que cantas...y llegamos a Banyoles y paseamos rodeando el lago hasta atrevernos a buscar al monstruo subidas en una barca...remos y risas...persecución de una gaviota, sentir el movimiento que produce la cola del monstruo bajo el agua, otro momento autofoto, la reyna tomando el sol y los orgasmos de arcademonio...dirección a Besalú la música de everything but the girl...mi cara un poema al ver la muralla de su castillo...disfrutando como una enana en las aguas del Fluvià, callejeando conocimos a un artista con el que intercambiamos abrazos por vino dulce en una bota, cervecita en la plaza, complicidad y silencios...Castellfollit de la Roca y el encanto de su ubicación, alojarnos en un lugar encantador, la cena divina y caer exhaustas...despertar e ir a Figueres, tocar los huevos a Dali y recorrer su creatividad...perdernos entre miradas...volver, sin ganas, con música de Sade y esa peculiar imaginación de arcademonio que vuela...
...gracias por mostrarme el lado dulce...
...un arcademonio feliz...
...infinitos besos de bolsillo...
