A mí el último mes antes de ir en navidades a mi tierra a estar con los mios, me cuesta. Me cuesta mucho, se me hace duro.
Esta vez se me está haciendo más duro porque sé que el panorama que me voy a encontrar en mi casa al llegar va a ser raro. Mitad alegría por mi llegada y mitad rabia e impotencia por la situación por la que están pasando mis padres.
Este año ha sido un año de querer olvidar. Empezó mal y pinta mal también al final. Las cosas hay que pasarlas, tener paciencia que todo pasa; pero esta vez está durando mucho mucho.....