Esta frase se la habremos escuchado mi hermana pequeña y yo a mi señora madre infinitas veces, que digo infinitas veces, infinitas veces infinito. Y si al primer refrán le añadimos "para cuando tu vas, yo ya estoy volviendo", a esas infinitas veces infinito habría que añadirle otro infinito. Sí, habrá gente que me de la razón y piense que mi señora madre se repetía mucho (hoy en día sigue siendo igual), a lo que yo debo añadir que mi señora madre tiene más razón que un santo y es tan sabia, tan sabia, que cuando mi hermana y yo liábamos alguna, ella siempre lo sabía.
Que la gente es muy chula y le gusta alardear, es algo que yo ya sabía. Que la gente miente más que habla, ya era conocido para mí. Que la gente tenga más cara que espalda, es algo que no me asombra ver.
Pero a pesar de los pesares, a pesar de ver que la gente tiene mucho morro y que mienten más que hablan, sigo sin entender por qué mienten diciendo que tienen su parte del trabajo hecha, cuando no es verdad. Es absurdo, cuando llegue el momento de comentar, comparar y mejorar el trabajo hecho, esas personas vagas y mentirosas se van a dejar en evidencia a sí mismas, porque ya se sabe que antes se pilla a un mentiroso que a un cojo....
(Modo melodramático on) Pongo a Dios por testigo que, nunca más haré un trabajo para la universidad en grupo.... ¡que harta estoy! (Modo melodramático off)
