Parece increíble pero de nuevo es mi cumpleaños,* ¡y parece que fue ayer cuando estaba escribiendo la entrada anterior! ¡Tempus fugit! Tan rápido parece pasar el tiempo que ya son 5 años en tierras germanas. Con sus veranos, sus inviernos y sus muchos muchos días grises. Por supuesto el sol nunca ha dejado de acompañarme en esta aventura, y su bien es cierto que a veces he dejado de verlo, por estar todo cubierto de espesas nubes, nunca he dudado que estuviera ahí…
Han sido 5 años de muchas experiencias, muchas vivencias acumuladas que me han hecho cambiar y crecer como persona. Si alguien me hubiera contando hace 5 años que hoy iba a estar donde estoy… ¡no lo hubiera creído! He tenido la inmensa suerte de conocer a mucha gente de países muy distintos y de poder compartir con ellos los últimos 5 años. He tenido la increíble fortuna de conocer a mi mitad teutona, que es sin duda es un gran compañero.
Tampoco hubiera creído que fuera a empezar un blog. Y que fuera a seguir con él a trancas y barrancas. Con entradas irregulares que no pretenden si no plasmar vivencias y opiniones que no son ni importantes ni relevantes, pero que son mías y que están formadas por las cosas que he vivido. Y señores, he vivido muchas cosas en poco tiempo. Los últimos 10 años de mi vida han pasado atómicos y creándome la sensación de haber vivido más en mis 26 años de vida, que muchas personas en su vida entera. Esto no es bueno ni malo. Simplemente forma parte de mi.
¡Gracias a todos por estar ahí!
¡Gracias a los que se han alegrado con mis logros!
*Es el sábado
*Es el sábado