viernes, 18 de enero de 2008

...como cada viernes...



...el destino me hizo un regalo...cruzó en mi vida a un grupo increíble de personas...mayores en edad y experiencia...me enseñaron tanto tanto...durante cuatro años hicieron especiales mis viernes...y ahora, lejos de ellos/as sigue parándose mi reloj cada viernes a las cuatro de la tarde...me pierdo en sus miradas atentas, esas miradas que irradian vida, energía, sabiduría, serenidad, templanza...yo su psicóloga loca...ellos/as mis niños/as...cada tarde les contaba un cuento, un guiño agradecido a tanto cariño recibido...cada tarde era una fiesta inigualable...podíamos hablar de cualquier cosa sin tabús, haciendo crítica constructiva de la vida...ellos/as sonreían sonrojados/as cada vez que halábamos de sexo...empaparon con su esencia cada rincón de mi alma...y dejé un pedacito de mi en cada uno de ellos/as...Pepe me regaló y dedicó su primer libro...dispuestos/as a beberse con intensidad cada sorbo de vida...me siento orgullosa de caminar a su lado parte del trayecto...algunos/as encontraron descanso a la sombra de un árbol y respetamos su silencio haciéndolos inmortales en cada miembro del grupo...ni siquiera el alzheimer ha matado mi recuerdo en algunos/as...y en mis brazos Lola...no sé quien adoptó a quien...

...hoy es viernes y a las cuatro me senté en el sillón...abrí un libro y conté un cuento de Benedetti: "Pacto de Sangre"...y al cerrar el libro permito que fluyan las lágrimas y escucho "La vida es un ratico" de Juanes...