sábado, 18 de febrero de 2012

¡Venga hombre, excusas las justas!

Tengo un cabreo encima que vamos, además es de esos cabreos que se van formando poco a poco a lo largo de una conversación y que son la consecuencia de esta. En este caso el origen de mi cabreo ha sido una conversación con mi maromen. Os pongo en antecedentes a ver qué opináis.

Yo vivo en una WG (Wohngemeinschaft, usea se piso compartido), somos 5 personas en total. Cuando yo me mude en mayo del año pasado eramos 3 chicos, una chica italiana y yo. Pues bien, resultó que la italiana era una tipeja de mucho cuidado con más cara que espalda. En verano hubo una conversación y ella consiguió pagar menos por su habitación a pesar de haber aceptado el precio inicial de esta. La habitación es la más grande todo el piso. Antes de mudarse la italana vivía en esa habiatción el compañero de piso número1 y paga lo mismo que pagaba la italiana al principio. Cuando tuvimos la conversación en verano el chico número 1 le dijo a ella que él había pagado ese precio durante dos años y la italiana le soltó de muy malas maneras que esa había sido su problema y no de ella, que a ella eso le daba igual. A mi me consta, porque me la ha dicho el propio chico número 1, que a él ese comentario le dolió.

En enero de fueron el chico número 2 y el número 3, la italana se fue a finales de enero. Yo he ayudado mucho a chico número uno roganizando las visitas para los futuros inquilinos, le he ayudado a preparar los contratos etc. Y le ofrecí mi apoyo y los pocos amigos que yo tenía en mayo del año pasado para que él no se sintiera tan solo, porque creedme, estaba más solo que la una. En definitva, he sido un apoyo para él y lo he hecho con gusto y sin recibir nada a cambio porque yo le consideraba amigo mío.

Aquí llega el conflicto: Hace tres semanas yo quise hacer un tipo de acuerdo escrito para que cuando él alquile mi habitación que esa persona nueva tenga el usufructo 6 meses y luego a mi se me pregunte si quiero volver a la habitación o no, lo de que sea escrito es una mera formalidad por si alguno de los nuevos compañeros de piso fuera también a convertirse en arrendatario del piso, para que quedara todo claro y no hubiera mal entendidos del tipo "es que yo dije... tú dijiste...". La cosa es que yo me quiero venir a vivir al piso de mi maromen con él, pero me da miedo que salga mal y verme en la calle. Creo que no tengo que recordaros lo mal que lo pasé buscando piso, por eso se me ocurrió lo del acuerdo. Pues el chico número uno en vez de tener narices y decirme "mira no lo hago por que no me sale de mis reales pelotas", estubo mareando la perdiz 20 minutos, hasta que al final me soltó la perla de " si sale mal con tu novio es tu problema, te buscas otro piso y punto". Para quitarle hierro dijo, "pero sabes que somos amigos".

¡Sí amigos por los cojones! Osea yo le echo una mano durante muchos meses y cuando yo le pido el favor de que cuando el alquile la habitación me pregunte si quiero volver al piso o no al de 6 meses, va y no lo hace...pues me parece mal, me parece muy mal.

Si excusa es que nadie alquila una habitación para 6 meses, cosa que no tiene ni pies ni cabeza porque muchiiiiiisima gente que venía a ver las habitaciones querían sólo 6 meses. En este caso no serían sólo 6 meses, esos 6 meses son prorrogables. Simplemente quería tener un seguro por si saliera mal.

¿Soy una exagerada o el chico número 1 no se ha portado bien?