Es bien sabido por todos, que por estas tierras hace frío. Aquí se empieza a notar ya ese fresquete otonnal que avisa de que no es buena idea salir de casa sin un pannuelo o fulard al cuello. Ese fresquete junto a que los días se han vuelto notablemente más cortos ( a las 19.30 está oscuro) nos hace recordar que aquí en otonno, pero sobre todo en invierno, no es muy agradable salir a pasear o hacer actividades al aire libre.
Es verdad que de vez en cuanto sale algún día precioso, con sol y unas temperaturas algo más agradables, pero no es la tónica general. Así que con estas perspectivas hay que pensar en cosas que se puedan hacer en casa y que no nos conviertan rapidamente en un Coach-potato. La cosa está dificil la verdad, por eso hay que estrujarse las ideas...
Yo he retomado hacer punto, se supone que lo que estoy tejiendo ahora se convertirá en una bufanda bonita, lo que no me queda my claro es, en que momento del proceso productivo sucederá...
Me encanta leer y por suerte ahora dispongo de algo más de tiempo, así puedo volver a engancharme a un montón de libros.
He empezado a tener interés y sobre todo ha llevarlo acabo, en las manualidades. Siempre me han gustado, lo que pasa es que siempre me he sentido torpe aunque luego al final resulta que no lo soy tanto.
Para las manualidad he decidido empezar por algo sencillo, estoy personalizando un cuaderno del Ikea que debe convertirse en mi agenda para la universidad.
Supongo que con tiempo, paciencia y dinerito para los materiales, quizás me convierta en una experta :D. Además por estas tierras eso del "selbst gemacht" o "hecho por ti mismo" suma muchos puntos