jueves, 14 de abril de 2011

Cochi-Katrin: el espicimen que es mi compañera de piso

Bueno, bueno, bueno, la aventura que está siendo compartir piso por primera vez en Berlín está llegando a su fin. Digo por primera vez, porque cuando me cambie al piso nuevo, yo ya seré una persona experimentada, lo que mi ex-abuela llamaría "una persona cultivada de la vida".

Llegué al piso el 17 de Septiembre, después de estar 10 días en una pensión de rusos, a la que por el bien de mi estabilidad mental no haremos alusión. Llegué al piso con muchas ganas, la primera vez que compartes piso en Alemania, con una alemana, las costumbres, el empezar a la uni y demás cosas me hacían coger todo con ganas.

La pobre ilusa de Cochi-Katrin se creía que iba a poder mangonearme, claro como ella es mayor que yo, se creía que ella iba a decir algo y yo iba a responder "si wuana". Que pena, se llevó un chasco, quien me conoce, ya sabe que conmigo así no van las cosas.

Al principio la catalogué de persona cerduna, ahora ya la llamo guarra con todas las letras. Acumula cosas, no recoge, no limpia pero sí mancha. Vamos un desastre para la casa. Cosa que a mi me pone de los nervios, porque yo cocino y limpio, hago el baño y demás cosas. Al principio tenía la esperanza de que fuera sólo mi imaginación, que  a veces yo también puedo ser un pelín (¡tampoco mucho eh!). Pero no, no era mi imaginación, ni eran ilusiones opticas cuando yo veía la cocina hecha una pocilga, el baño sin limpiar etc. Es que ella es así. Lo que es peor, es que es y seguirá siendo así, porque lo que no aprendes con 29 no lo aprendes con 30. Cosas de la edad.

Su última ida de olla fue bloquear internet. Gente, a mi no me preguntéis como va eso, la cosa es que mi maromen, que de estas cosas sabe mucho, me lo confirmó. Yo sospechaba que era culpa de  cochi-katrin y no del modem, porque cuando ella no está en casa va bien, y cuando ella se conecta ya no tengo conexión. Total que fuí y le pregunté haciendome la tonta y todavía tiene el morro de soltarme " es que tu ordenador no anadará bien". Ya tengo internet otra vez, pero es que ¡manda huevos!

Menos mal que no hay mal que cien años dure, y me quedan en este piso dos semanitas